Con una emotiva ceremonia se llevó a cabo ayer lunes la conmemoración de la historia de la congregación en la capilla Nuestra Señora de la Providencia.
Fue un 6 de marzo de 1973 que llegaron al país desde Italia las hermanas Sindulfa Sánchez, Mariuccia Meroni y María Belcaro de la Congregación Hijas de Santa María de la Providencia, a fin de cumplir la labor cristiana de ayudar al prójimo a través de la compasión y la acción humanitaria.
Su dedicación y su ayuda solidaria hizo que la congregación se ramificará por diferentes partes de Chile, estando en la actualidad en tres localidades: Renca, Coyhaique y Llolleo.
Y es por eso que ayer lunes las hermanas religiosas del Techo Fraterno de Llolleo celebraron con una emotiva ceremonia en la capilla Nuestra Señora de la Providencia de Llolleo exactamente 50 años de tan importante acontecimiento, y en la que participó gran parte de la comunidad religiosa.
“Para mi esta conmemoración significa mucho, ya que al ver a tanta gente que nos ha acompañado a lo largo de estos años en la comunidad, alegra mucho el corazón y muestra también el cariño que tiene la comunidad con nosotras. Hay mucho integrantes que ya han partido a la casa de nuestro padre eterno, y que seguramente también nos acompañan desde esa eternidad, pero también se han integrado nuevas personas y por eso nos sentimos muy bendecidas. Estamos agradecidos porque estuvieron aqui los párrocos padre Gerardo, el padre Vicente, el padre Guillermo, el padre Cristian, hermano de la hermana Mónica y también integrantes de los sacerdotes guanelianos Siervos de la Caridad, que fueron los que albergaron a nuestra congregación cuando llegó a Chile”, dijo a AquiSanAntonio.cl la hermana Hilda Cornejo de la comunidad del Techo Fraterno y capilla Nuestra Señora de la Divina Providencia y quien lleva muchos años en la congregación.
La hermana Mónica Moya por su parte comentó que “yo soy una convencida de que esto es obra y gracia del señor, y en ese sentido uno solo puede tener una gratitud por todo esto. Sobre todo con la gente que es la que más comparte ese cariño. Por eso siento que el señor da la grandeza en todo y estoy más que feliz de poder ser integrante de esta gran obra”.