El martes 1 de marzo autoridades municipales viajaron a la Dirección Regional de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas (MOP) en Valparaíso a fin de procurar una correcta mantención del recinto.
Un giro de 180 grados tuvo esta semana el caso del nuevo estadio Municipal Doctor Olegario Henríquez de San Antonio. Y es que a través de un comunicado la municipalidad de San Antonio anunció finalmente que se hará a cargo de la mantención y seguridad del nuevo coliseo deportivo.
Según informó el municipio sanantonino, durante el mediodía del martes 1 de marzo las autoridades municipales viajaron a la Dirección Regional de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas (MOP) en Valparaíso a fin de procurar una correcta mantención del recinto.
En la reunión estuvo presente el administrador municipal, Alejandro Aguilar, la directora de la Secretaría Comunal de Planificación (Secplac), Elisa González, el inspector fiscal de la obra, Hans Kampe, además del titular de la Dirección de Arquitectura, Julio Pérez.
La municipalidad indicó que en la instancia las autoridades del municipio solicitaron los manuales del recinto, en virtud de la necesidad de resguardar el futuro del deporte local y poder acceder a las instalaciones, con el fin de hacerse cargo de la mantención del césped como también verificar el correcto funcionamiento del recinto tan esperado por la comunidad sanantonina.
POLÉMICA
El nuevo estadio ha estado en polémica estos últimos días, luego de que la municipalidad de San Antonio decidiera no hacer recepción del coliseo entregado por el MOP, alegando de que este presentaría aún observaciones que no permitirían su uso a la comunidad.
El 26 de enero del presente año el MOP concurrió a las instalaciones del nuevo estadio para hacer entrega de las llaves y de la obra al municipio. Sin embargo, a la cita no concurrió la alcaldesa ni algún representante municipal, haciéndose finalmente la recepción por la Oficina de Partes del municipio.
El 3 de febrero el municipio hizo devolución “por secretaría” de la documentación y de las llaves del coliseo, alegando de que este no contaría con la “Recepción Final” que permitiría finalmente su apertura a la comunidad.
El 17 de febrero se viralizaron por las redes sociales unas imágenes que mostraban el estado de abandono que estaba sufriendo el nuevo estadio, en donde se apreciaba el pasto de la cancha seco y la pista atlética con signos de deterioro, luego de que la empresa constructora encargada de la obra dejara el lugar.