·La autoridad comunal y deportistas repudiaron la acción vandálica.
La tarde del lunes 5 de octubre la seremi del Deporte, Ruth Olivera admitió que el Estadio Municipal de San Antonio presentaba algunos retrasos y pronosticaba su entrega para el 29 de noviembre. Después de una visita al recinto aseguró que el avance de la obra es de un 99 por ciento.
No quedaba nada para terminar: solo detalles en las terminaciones.
Eso era antes de los destrozos que ocasionaron algunos sujetos la misma noche del lunes, en una protesta que se registró con una barricada en Barros Luco con Luis Uribe.
Los individuos sacaron parte del cierre perimetral provisorio, rayaron los muros y destrozaron algunas cortinas.
El MOP no entregó un reporte detallado de los destrozos, a pesar de las consultas efectuadas.
Desde la municipalidad dijeron que lanzaron bolsas de pintura, rayados a cortinas y quebraron vidrios.
REPUDIO
El alcalde Omar Vera aseguró que la entrega se demorará más, por los destrozos. “Todo daño que afecta a una infraestructura que aún se está terminando es indudable que se puede retrasar y afecta a la comunidad toda”, explicó.
El edil dijo que, más allá de las reivindicaciones de la ciudadanía que se manifiesta, “no comparto el daño al bien público, al bien todos los sanantoninos y sanantoninas, que es la infraestructura del estadio”.
Por eso Omar Vera llamó a “la prudencia, la responsabilidad a la calma, al equilibrio de respetar el espacio y el derecho de los demás, de esa manera podemos construir. No tiene sentido destruir, porque no nos lleva a ninguna parte”.
MOLESTO Y TRISTE
Salvador Plaza, atleta de San Antonio y profesor de otros proyectos de la actividad, confesó que “estamos molestos y tristes, por el espectáculo que estamos dando“.
Advirtió que “estoy claro que no son todos los que protestan o se manifiestan. Llamo a todos a cuidar nuestro estadio, que es de todos. No lo pueden destrozar antes de inaugurarlo ni tampoco después“.
8 AÑOS DE ESPERA
Christian Ovalle, director de la Secpla, analizó los actos registrados el lunes. “Estamos destruyendo el patrimonio de la ciudad, las manifestaciones pueden ser legítimas, pero no destruyendo la ciudad. Esta es una obra para todos, es un anhelo de años. El llamado es a cuidar el estadio y a la ciudad“.
El funcionario municipal recordó que este proyecto por 12.500 millones de pesos demoró 8 años en concretarse. Por eso dijo que “no lo podemos destruir antes de recibirlo, y tampoco después”.