La comunidad tiene una basta trayectoria ligada a la cooperación, la hermandad y al auxilio de los más desvalidos.
Octubre es el “Mes Internacional del Leonismo” y eso lo sabe perfectamente el Club de Leones San Antonio – Llolleo. Es por ello que, con motivo de conmemorar tan importante fecha, sus 16 integrantes se encuentran realizando una serie de actividades solidarias en terreno, en donde están haciendo cumplir cabalmente su lema de “servir y apoyar a la gente más necesitada”.
Así lo comenta Patricia Catalán, actual secretaria del Comité de Damas de la agrupación, quien conversó con AquiSanAntonio.cl respecto a las diversas instancias que han estado realizando, señalando que “el Club de Leones está siempre activo y haciendo cosas todos los meses. Sin embargo, por ser octubre el Mes del Leonismo, estamos ahora tratando de hacer mucho más, ya que como dice nuestro lema, hay que servir a la comunidad”.
Catalán cuenta que “el pasado sábado 8 de octubre se llevó a cabo el Día Internacional del Club de Leones, ya que nuestra organización está en varios rincones del planeta. Ese día nosotros quisimos hacer un actividad especial a los abuelitos que están en el hogar de ancianos El Arrayán, así que les preparamos una rica once en donde les ofrecimos pastelitos, golosinas y también sus sándwiches, pasándola todos bien ese día”.
Y añade que “el pasado miércoles realizamos una visita a las hermanas y a la comunidad religiosa del Techo Fraterno Guaneliano de Llolleo en donde les obsequiamos manteca a fin de que pudieran seguir con su amasandería solidaria, y también pañales para que fueran en ayuda de varios adultos mayores”.
“En este mes hemos estado con hartas actividades solidarias. Hemos estado también ayudando a la comunidad religiosa de las Planicies de Bellavista. Como las hermanas también tienen su panadería solidaria, le llevamos todos los meses un balón de gas para que puedan seguir con su hermosa labor. Además, cuando tienen problemas con su horno, nosotros las auxiliamos con un técnico para que le haga mantención”, señala Patricia.
La “leona” también relata que “además, tras enterarnos del caso de la señora Francisca Liberona y de su hijo Lucas, el cual necesita ayuda por una enfermedad genética, es que decidimos regalarle una serie de cosas, dos refrigeradores, un escritorio, una mesa de televisor, una bicicleta, un juego de living, etc. para que ella pueda recaudar fondos y así reunir el dinero que necesita para que su niño pueda ser diagnosticado en EE.UU.”.
“Ahora, otra cosa que hemos estado haciendo es coordinar las acciones para que un grupo de niños de un colegio de escasos recursos de Rancagua pueda conocer la costa. Estamos ya preparando los últimos detalles para que puedan venir y visiten San Antonio con un paseo en lancha, un almuerzo y también puedan visitar el museo. Son 30 niños que vamos a recibirlos y atenderlos como corresponde”, dijo Catalán.