Tradicional restorán de Las Cruces fue el primero en atender público en su terraza con distancia y medidas sanitarias

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·El “Puesta de Sol” abrió sus puertas después de 6 meses impedido de ofrecer sus exquisiteces.

Más de 6 meses sin atender público. Por eso este sábado 3 de octubre fue un día alegre para los dueños de los restoranes en El Tabo.

Los locales comenzaron a recibir clientes en aquellos establecimientos que tienen terraza.

Uno de los primeros en abrir fue uno de los tradicionales restoranes de Las Cruces: el Puesta de Sol.

El local que está en la costanera de la Playa de Las Cadenas o la Playa Chica se preparó para este momento.

“Desde el 20 de marzo que nos bajaron la cortina de forma sorpresiva. La pérdida fue mucha, porque teníamos mercadería guardada para Semana Santa”, contó Efraín Jeria, el dueño de este emblemático centro gastronómico del balneario.

La terrazas del Puesta de Sol de Las Cruces en el primer día de atención pospandemia.

La pérdida de recursos fue cuantiosa, pero al menos el Puesta de Sol pasó el embate del covid.

“Sobreviví bien porque soy ordenado, no tenía ninguna deuda, un local propio y una espalda, no tan ancha, pero algo había“, contó sobre su receta para pasar la pandemia.

Este sábado el Puesta de Sol reabrió. “Funcionamos con todos los protocolos sanitarios, estamos bien preparados, esperábamos abrir del 9 al 12 de octubre, pero ahora probamos para ver cómo funcionaba.

-¿Atenderán menos gente?

-Tenemos una terraza amplia y se colocaron las mesas a distancia, además tenemos baños en la terraza y al interior del local. Seguimos los instructivos de la autoridad para informarnos de los protocolos.

Efraín Jeria, el dueño del Puesta de Sol.

-¿Cómo están atendiendo?

-Nos tuvimos que  reacondicionar, porque la forma de trabajar es muy distinta. Reduciremos las cartas, con menos productos y en un atril en la mesa, para que la gente no la tome, solo la vea y estaremos desinfectando constantemente.

-¿Tomaron otras medidas?

-El personal lo tendremos que bajar casi a la mitad, funcionábamos con 10 garzones y ahora quedamos con 3. Tenemos que cumplir con los trabajadores y si les ofrecemos un sueldo se tiene que pagar.

El Tabo vuelve a la “normalidad” al menos con sus restoranes, que retoman la atención al público después de 6 meses con sus puertas cerradas.


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