Lee aquí la última columna de opinión realizada por Sergio Velasco de la Cerda.
CHILE, es el paraíso de los narcotraficantes del mundo. Declaraciones realizadas hace más de una década por el senador democratacristiano Patricio Walker, alarmado por las altas cantidades de drogas que se embarcaban por los puertos chilenos.
La denuncia quedó bien guardada en algún escritorio ministerial, para no levantar mucha suspicacia, particularmente a los grandes capitales involucrados, de la “cosa nostra.”
La Asamblea General de las Naciones Unidas, declaró, al país, “nación peligrosa” por haber constatado a través de investigaciones serias irrefutables, que el litoral chileno con sus 4.200 KM de costa, era o es, el lugar donde se puede embarcar la droga sin mayor control. ¿Dejémoslo ahí, para no entrar en más detalles?
Aclaremos el país no es productor de coca, ni tiene plantaciones como los países cercanos a nuestras fronteras. Tenemos puertos muy eficientes, en transporte marítimo, pero con escasa tecnología de punta para escanear y revisar cada contenedor. Hecho sumamente conocido por las mafias instaladas en el litoral chileno, los que les brida mayor impunidad.
A ello se suma la legislación que, con el secreto bancario, le entrega impunidad total a los operadores, que no pueden ser investigados en sus movimientos en las cuentas corrientes sin que haya una causa judicial.
El líder de la banda de los Balcanes, que operaba desde Chile, envió 18 toneladas de clorhidrato de cocaína, en un barco que zarpó del puerto de coronel, siendo decomisado en Filadelfia (EE: UU). Para no ser menos, del puerto de Arica, zarpa la nave “NATIVA” con nueve toneladas de coca. Lo sigue el “El Harbour” avistada y revisada sus bodegas, con cinco toneladas de la pura coca.
San Antonio el principal puerto de Chile, entonces con scanner malo, por sobre un año, no podía quedar atrás. El MSC “CARLOTA” zarpa con 1.437 kilos de coca pura, el 27 de febrero de 2019, directo a Nueva York. Dicha nave fue incautada, después de dos meses devuelta a sus armadores. Insistentes vuelven a cometer el mismo delito. Zarpa de Coronel, con dos toneladas de coca. Fueron sorprendidos por la policía peruana en el puerto del Callao.
Las mafias nos tenían acorralados por cielo mar y tierra, hasta que lograron detener al jefe del operativo del cartel de los Balcanes para América.
Nicolas Carozzo, el padrino jefe de la familia Gambino, tiene como sus “consigliere” a su sobrino Joseph Carozzo, abogado que defiende en los tribunales norteamericano a Goran Gosic, el capo de tuti capi, hoy preso, por ser el “articulador” de todos estos envíos, los escasos que se han descubierto. Temen que si Gosic confiesa caen como mosca muchos otros involucrados de la alta sociedad. Italoamericana. La película de Ford Coppola en tiempo real.
Mas de mil millones de dólares, pagaron los financistas, a los productores de cocaína colombianos y a larga cadena, por esta mercancía, la que es comercializada de preferencia en los Estados Unidos, donde rinde mucho más.
No es el único flanco que tenemos, en materia de delincuencia internacional. Delincuentes chilenos con visa Waiver , han asaltado y robado en residencias lujosas. Autoridades norteamericanas, alcaldes, jueces y congresista, encabezado por el actual secretario de Estado Marco Rubio, piden que se revoque el beneficio, que, dicho sea de paso, es el único país latinoamericano que la posee. ¡No la perdamos!
Chile está en el ojo del huracán, en esta materia, expuesto a que en el día de mañana el presidente Donal Trump, simplemente nos eleve los aranceles al 25 % como ya lo hecho con México, Canadá y un 10 % a China, postergado por un mes a última hora, buscara cualquier excusa o pretexto, para seguir con nosotros.
La guerra comercial iniciada por el gobierno de Trump, no debe continuar. Es tiempo de la razón y el dialogo, antes que la confrontación y la odiosa imposición, que ha nada conduce.