Vida saludable: alimentación para los más pequeños del hogar

Compartir

La nutricionista sanantonina Jéssica Quiroz entrega importantes consejos para una buena alimentación para preescolares y escolares.

Existe una edad para enseñar con mayor énfasis hábitos alimentarios a los mas pequeños? La respuesta es sí. De hecho según una investigación, que fue publicada en la edición online de la revista especializada Journal of the American College of Cardiology, indica que enseñar a los niños de edad preescolar sobre hábitos saludables puede reducir su riesgo de desarrollar obesidad y enfermedad cardíaca más adelante en su vida.

Los resultados de este estudio, fueron más efectivos en los niños de 4 años, lo que sugiere que esta es una buena edad para iniciar la enseñanza de hábitos saludables en los pequeños, ya que a esta edad son más maduros y más capaces de retener la información.

Según mi experiencia como nutricionista, una intervención temprana es efectiva en los niños en edad preescolar, y esto también puede promover las conductas saludables entre los padres, ya que estos cambios o enseñanza involucran a todo el núcleo familiar. Y ante esto, podemos preguntarnos, como le enseño o le digo a mi hijo que debe tomar agua si yo solo tomo bebida, o siempre hay bebida en esa casa? Será claramente contradictorio y difícil de llevar a cabo.

¿Qué hacer?

Comenzar por realizar las 4 o 5 comidas al día (según el niño o estado nutricional lo requiera) Estas son: Desayuno a una hora prudente, como hoy estamos en etapa escolar, el desayuno será a una hora optima (temprano) es por lo mismo que se debe inculcar que el niño tome desayuno y no que se conecte a clases o vaya al colegio sin esta comida y por supuesto también vea al adulto hacerlo.

Luego 3 horas, debiese existir una colación saludable (fruta, frutos secos, yogurt, leche, ½ pan integral con quesillo, palta o tomate o jamón de pavo o queso) el pan será idealmente si el niño no comió pan en el desayuno.

Esta colación servirá para evitar que el niño tenga un hambre excesiva y no respete las cantidades adecuadas de su almuerzo. Siendo este compuesto por un plato de fondo (legumbres o carbonada o fideos integrales con salsa, cazuela de ave, pavo, vacuno con arroz etc) siendo siempre este plato acompañado por una ensalada surtida y un postre de fruta o en ocasión un flan bajo en azúcar.

Posterior a esta comida, debiesen pasar máximo 3 horas donde el niño pueda optar a un yogurt con fruta, a una sola pieza de fruta, a unas galletas en base a avena, arroz o harina integral o una rebanada de queque saludable con un vaso de leche en caso de mas hambre.

En este tiempo del día, debe existir algo de actividad física y consumo de agua, esto hará que su digestión sea saludable, esto quiere decir que lo que se excreta sea en algo igualado a la cantidad de comida que se consume. Además, el consumo de agua hará que el niño se sienta mas tranquilo, calme la ansiedad y esas ganas de comer solo por la idea de comer.

Y por ultimo en caso de obesidad y sobrepeso del niño es mejor evitar el consumo de masas como el pan y dejar una opción de cena liviana. Evitando el arroz, el puré, los fideos. Y optando por preparaciones como un omelette con jamón y verduras mas una ensalada o un plato de cazuela moderado mas una ensalada, un trozo de pollo, pavo o pescado o vacuno desgrasado mas un cereal mas liviano como el cus cus o la quínoa y no olvidar la ensalada. Esta comida no debiese sobrepasar las 20 horas.

Esta planificación u orden que entrego debiese facilitar tu rutina con teletrabajo, es por eso, que también te recomiendo:

  1. Establecer el menú de toda la semana. Esta manera evitara que te quedes sin ideas y termines optando a una opción hipercalórica más veces de las que quisieras, además de cuidar tu bolsillo.
  2. Compra todo lo que necesites antes de empezar. Es la mejor forma para no tener excusas de no hacer esa comida saludable por falta de algún ingrediente principal, también evitara que te estreses de mas por las otras necesidades que requerirán de la atención del adulto, no sintiendo dispersa y si mas ordenada.
  3. Elige platos de elaboración sencilla o cocina la noche anterior. Escoge platos que seas capaz o te gusten prepararlos, te sugiero que estos no sean fritos, cargados a la sal, cremas o grasas como la mantequilla. Y siempre acompaña con una ensalada que se vea apetitosa. (conversa con los mas pequeñas y lleguen a un acuerdo de que ensaladas ricas quisieran acompañar esa carne o ese pollito al horno)
  4.  Controla el consumo de snacks y de azúcar. Disminuye el consumo de galletas azucaradas, intenta hacer un queque el día domingo y opta a porciones de este como snack en la semana. Prefieran la fruta, un yogurt, algunas nueces maní o almendras. Que una semana no existan galletas en tu despensa no tiene nada de malo. Todo lo contrario.


Compartir