·El dinero aprobado por el gobierno regional está trabado en la Dirección de Presupuestos. “La gente tiene hambre ahora” alegó el core Jorge Mora.
El 6 de julio el intendente Jorge Martínez anunció un millonario programa para reactivar la economía de la Región de Valparaíso. El denominado Plan Covid destinó la “cifra histórica”, como la misma autoridad la calificó, de 28 mil millones de pesos para distintas obras y programas sociales.
Compra de cajas de alimentos, construcción de infraestructura y generación de empleos son algunos de los aspectos que busca financiar el programa aprobado por el gobierno regional.
Además de contemplaba un aporte de 200 millones de pesos para respaldar a las ollas comunes, que a causa de la crisis económica surgieron en las poblaciones para ayudar a los vecinos más necesitados por la falta de alimentos, la cesantía y la precaridad.
Hasta ahí todo, pero esta semana se supo que el plan de ayuda para estos “comedores comunitarios” está trabada a causa de la “burocracia”, como explicó el core Jorge Mora (RD).
Su colega Mauricio Pérez, recibió la queja de distintas organizaciones sociales, vecinales y de carácter voluntario que se percataron del retraso en la entrega de la ayuda.
El programa contempla un aporte para 286 ollas comunes y Fundación Caritas asumirá el abastecimiento, operación que solo se materializará en septiembre, ya que por trámites burocráticos la Dirección de Presupuestos aún no aprueba estos dineros.
El core Jorge Mora contó que recién esta semana se firmó el convenio con Caritas y eso retrasará aún más la llegada de la ayuda a los pobladores. “La gente tiene hambre ahora, no en septiembre”, denunció.
“Es absurdo y la Dirección de Presupuestos es la que tiene el dinero atrapado”, agregó.
Sobre el aporte el core sanantonino recordó que “en el proyecto que aprobamos en julio, para inyectar dinero en la emergencia a la región iban 200 millones en apoyo a las ollas comunes. Eso se canalizó a través de Caritas Chile que hizo el proyecto, donde categorizó las ollas comunes de acuerdo a la cantidad de personas que tengan“.
La primera pelea que se dio en el Gobierno Regional fue por los productos que se adquirirían. “El intendente quería comprar elementos de higiene para las ollas, pero la gente necesita alimentos”, relató el consejero regional.
Se consiguió que parte del monto se destinará a la compra de alimentos.
Pero la burocracia continuó. “Esto se aprobó en julio, el convenio recién se firmó la semana pasada. Ahora se tiene que esperar que la Dirección de Presupuestos entregue el dinero, lo que demora un mes aproximadamente”, detalló Jorge Mora.
“Esperamos que en la mitad de septiembre se puedan hacer las compras para entegrar la ayuda” fue la desalentadora proyección del consejero.
La crítica sobre el proceder es evidente en el sanantonino. “Es absurdo cómo se está procediendo. Si aprobamos recursos para la emergencia, lo dice la palabra, y se entrega el dinero meses después”.
La demora generó molestia entre todos los integrantes del gobierno regional, que pidieron revisar los procedimientos de la Dirección de Presupuestos para agilizar la entrega de recursos durante la crisis sanitaria y económica.
De acuerdo a los criterios de Caritas unas 20 ollas comunes de la provincia recibirán el aporte, que llegará cuando se espera que el avance de la pandemia esté en retirada.
“La gente tiene hambre ahora y las ollas comunes están haciendo el trabajo que no hizo el Estado”, fue la reflexión final del consejero Jorge Mora ante la burocracia que como siempre afecta a los que menos tienen.