Presidenta de Mesa de Defensa por el Estadio y nuevo atraso: “Tengo una indignación tremenda”

Compartir

Con tristeza y rabia reaccionó Liliana Cancino al anuncio realizado ayer por autoridades de que el coliseo deportivo de San Antonio no podrá ser entregado para uso público.

Con indignación y tristeza reaccionó la dirigenta deportiva y presidenta de la Mesa de Defensa por el Estadio, Liliana Cancino, a las declaraciones hechas por autoridades, en donde informaron que finalmente el nuevo Estadio Municipal de San Antonio no podrá ser entregado para uso público debido a graves fallas que presentaría el coliseo.

Fue en una reunión realizada ayer jueves en el salón del Consejo Municipal de San Antonio, que el seremi de Obras Públicas de Valparaíso, Yanino Riquelme, dio a conocer la mala noticia a la comunidad, señalando que la causa sería que las estructuras horizontales y verticales del recinto cuentan con una protección contra el fuego que no cumple con la normativa adecuada.

Al respecto, Cancino manifestó que “es terrible esta situación. Esto es un duelo. Fue desesperante escuchar a esta gente venir a decirnos que iban a tener que desarmar el estadio para poner esta pintura incandescente a prueba de incendio. De eso se trata todo este drama. Sencillamente esto ya colmó la paciencia”.

La dirigenta señaló que “se supone que hoy día la Seremi venía a entregar la carpeta para que las obras fueran recepcionadas definitivamente, y ahora nos salen con esto. Anterior a esta reunión, solo informaban sobre temas de trámites, papeles, patentes, es decir, todo de forma, y ahora que vengan a decirnos que el estadio finalmente no tiene fecha de entrega, sencillamente no da para más. Si se han demorado dos años en trámites, ahora con esto que tienen que hacer lo más seguro es que la entrega se haga el 2025”.

Y añadió que “es una desgracia. Es fácil para los Seremis venir a decirnos que tengamos paciencia, porque ellos están pagados y su sueldo no lo pierden. Al próximo gobierno van a seguir en su puesto. Al final dicen esto de que esperemos, porque nos miran en menos. Para ellos, los sanatoninos no somos nada”.

“Tengo una indignación tremenda, una rabia y una impotencia de no poder celebrar nunca la inauguración de este estadio. Cuando estábamos luchando para que se diseñara y se hiciera, nos decían que no habían plata en los presupuestos. Peleamos casi tres años para que finalmente se entregara la plata y se construyera. Cuando pensamos que por fin había una luz de esperanza para su entrega, nos vienen con esta estupidez. Al final, toda esa gente que inspeccionó el estadio solo vino a tomarse selfies y a hacer campaña política, porque no se entiende que ahora tengan que hacer esto”, dijo entre lágrimas Cancino.


Compartir