El gremio de los botilleros de San Antonio denuncia discriminación por el impedimento de funcionar en la comuna.
El conflicto entre el gremio de las botillerías y las autoridades sumó un nuevo capítulo. Luego de que el Concejo Municipal de San Antonio modificó la ordenanza que regula el horario de atención de los locales, muchos pensaron que esto permitiría la apertura en medio de la cuarentena por la pandemia de covid.
Pero el mismo día que el concejo estableció el horario entre las 10 y las 20 horas, el alcalde de la comuna de San Antonio, Omar Vera, salió a aclarar que la decisión del funcionamiento no era injerencia del gobierno comunal. La medida solo buscaba adecuar el funcionamiento con el toque de queda que rige entre las 10 de la noche y las 5 de la madrugada.
A pesar de la advertencia, muchas botillerías abrieron y según la denuncia del gremio los locales fueron cerrados nuevamente. El dirigente Cristian Lacalle, a través de un video que circula por distintas redes sociales aseguró que “se había generado una ordenanza para el funcionamiento de las botillerías de 10 a 20 horas y por alguna razón Carabineros y las fuerzas armadas cerraron todos los locales comerciales del rubro”.
Los botilleros sanantoninos exigen las mismas condiciones -que según ellos- imperan en otras comunas en cuarentena y se equipare su funcionamiento con los supermercados, que también venden alcohol. Además apelan a la crisis económica que afecta a unas 1.500 personas que trabajan en esta actividad.
Más allá del error de interpretación de la ordenanza, los botilleros piden un trato igualitario, pues tildan la situación que enfrentan como una “discriminación”.
Incluso intervino en la controversia el diputado de RN Andrés Celis quien asegura que le envió un oficio al ministro de Salud, Enrique Paris, para que establezca instrucciones claras sobre el funcionamiento de las botillerías.
NO SON ESENCIALES
Una vez más el seremi de Salud, Jaime Jamett, se refirió al tema de las botillerías de San Antonio, y entregó la explicación de porqué estos locales no pueden funcionar en las comunas bajo cuarentena.
“En los instructivos de los ministerios del Interior y de Defensa respecto a cuales son las condiciones establecidas para el cumplimiento de la excepción constitucional en la que nos encontramos es importante señalar que se han definido ciertos rubros que son esenciales, en ese sentido la venta de alcohol no está definida dentro de esos rubros”, argumentó.
Y agregó que “los establecimientos que no cuenten con una patente de venta de alimentos y sí una de venta de alcoholes se ven imposibilitados de funcionar”.
Jamett aclaró que la “autoridad sanitaria regional no tiene la facultad para autorizar el funcionamiento de las botillerías, pero si puede instruir sumarios sanitarios y prohibir el funcionamiento cuando una actividad se aleja de las normas sanitarias establecidas”.
Además le restó valor a los decretos alcaldicios que se puedan emitir sobre el funcionamiento de las botillerías. “La venta de alcoholes es improcedente desde el punto de vista de una normativa municipal, dado que rige una norma superior, que es el estado de excepción constitucional”.
Frente al argumento usado por los botilleros sobre venta de alcohol en los supermercados Jamett dijo que “las restricciones de movilidad en las cuarentenas no pretenden equiparar situaciones comerciales de un rubro en específico. Las medidas se aplican cuando el establecimiento no cuenta con una patente de alimentos. Solo pueden vender si tienen una patente de alimentos, tal como los establece en forma prioritaria el instructivo, vale decir, supermercados, minimarket y otros establecimientos que vendan alimentos y alcoholes no están imposibilitados de abrir”, reiteró el seremi de Salud.
Fotografía Facebook Botillería El Cielo.