Búsqueda del “Huirazacha” Morales continúa este lunes a pesar de la lluvia

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La noche del domingo llegó desde Santiago un equipo especializado que reforzará las tareas.

“No nos vamos a detener hasta que lo encontremos”, sostiene con convicción y entre lágrimas María Eugenia Meneses, prima “hermana” de Hugo Morales, el vendedor de hierbas de Cartagena que el viernes 19 de junio desapareció sin dejar rastros.

Las tareas se repartirán en distintos frentes, pero uno de los principales de concentrará en la Caleta San Pedro de Cartagena. La noche del domingo llegó a la zona un grupo especializado en búsqueda de personas desde Santiago y desde las 8 de la mañana inició sus labor.

El domingo la familia de Hugo “Huirazacha”, Morales (58) hizo un llamado a la comunidad a participar en una búsqueda masiva en el Cerro Bellavista. La convocatoria era en la toma Las Loicas, donde las personas se repartirían para buscar alguna pista del vendedor ambulante de hierbas medicinales de Cartagena.

“Fue mucha gente, como unas 70 personas, entre los bomberos, llegó gente en moto, caballos, toda la gente de la toma Las Loicas, nosotros la familia, vecinos, harta gente”, contó María Eugenia Morales, prima del desaparecido, quien se considera hermana del comerciante ambulante.

Sobre la labor realizada detalló que “nos dividimos en grupos y se rastreó todo, desde la Tumba del Poeta hasta la subida al Cerro Alegre, todo, hasta con drones. Ahí ya no hay donde buscar. Ese sector se hizo completo, nosotros lo recorrimos por arriba, pero ahora se cepilló todo”.

“Agradecemos a todas las personas que participaron en la búsqueda,  vecinos, amigos, jóvenes en motos, vecinos en caballo, un joven  llegó con su dron y a los Bomberos de Cartagena”, expresó María Eugenia.

Luego en la tarde la familia recorrió algunos balnearios: San Sebastián, Costa Azul y San Carlos. La jornada, que partió a las 8 de la mañana terminó a las 9 y media de la noche.

-¿Por qué fueron a El Tabo?

-Vinimos a San Sebastián y a Costa Azul, porque mi hermano tenía unos amigos por ahí, pensamos que pudo ir a verlos. Consultamos, pero no lo vieron, nada.

“En realidad ya no tenemos dónde más buscar. Estamos agotando todas las opciones, buscando donde sea, ya no sabemos más que hacer”.

María Eugenia Meneses, prima del desaparecido.

-¿Alguna información de la PDI?

-Ellos están haciendo sus trámites, lo único que nos informaron es que interrogaron testigos, una niña de un colectivo y un hermano de la iglesia.

A pesar de la lluvia pronosticada para este lunes la búsqueda proseguirá. La familia de Héctor Morales contactó a un equipo especializado en búsqueda de personas. Anoche el equipo llegó a la zona y comenzó su labor a las 8 de la mañana en la Caleta San Pedro de Cartagena.

-¿Cómo supo de ellos?

-Una prima de Santiago conoce a mucha gente y ella los contactó. Mi otro hermano, que es de Santiago, allá se corrió la voz y las fotos y la gente está haciendo contactos. Esperamos que alguien vea algo o sepa algo y avise.

Un grupo especializado en búsqueda de personas reforzará la labor.

Otros frentes de búsqueda

Paralelamente María Eugenia desarrollará otras gestiones agotando las últimas opciones que les quedan. “Voy a ir a las morgues otra vez, puede haberpersonas NN y si mi hermano no andaba con su carné puede estar. Pediré que me dejen reconocer”.

Otra de las esperanzas que le quedan a la familia son las imágenes de alguna cámara de seguridad de Pelancura.

“La última vez que mi hermano (María Eugenia le dice hermano a Hugo) se vio fue en el cordón sanitario, donde lo bajaron de una micro. Esa fue la última vez que lo vieron, el viernes 19 de junio. Según lo que dice la PDI como a las 11 y media, 20 para las 12 lo bajaron de la micro donde iba. Él se devolvió a pie. Ahí se perdió el rastro de mi hermano. En Pelancura y en todo ese sector la gente pudo ver algo, si hay cámaras alguna lo pudo grabar”, planteó con ilusión de dar con una pista que guíe la investigación.

La familia seguirá buscando. “No nos vamos a detener hasta que lo encontremos”, prometió María Eugenia, con la voz entrecortada por las lágrimas.


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